Durante el pasado verano, el Barcelona acometió la renovación de Pau Cubarsí. Firmó por tres temporadas. No puede alargarse más al ser menor de edad, hasta junio del 2026 y con una cláusula de rescisión de tan solo 10 millones de euros.
Lo que pocos conocen es que fue su representante el que, en plenas negociaciones en verano, pidió que Cubarsí pasara ya a tener ficha del filial de Rafa Márquez. Estaban convencidos de que se le quedaría corto el juvenil, como así ha sido.
La primera intención de Deco y José Ramón Alexanco, este último responsable máximo de cantera, que querían ser más prudentes, era la de inscribirle en el Juvenil. Al final convencieron al club del salto hasta el Barcelona Atlètic.
La explosión en el Mundial sub 17 confirmó lo que muchos ya intuían, que estamos ante un jugador muy especial. Ahora se están sentando las bases para la renovación. Cubarsí espera que el club tenga claro su presupuesto y posibilidades y su Fair play y haga una oferta en condiciones.
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Hasta la mayoría de edad los clubes ingleses no le pueden firmar. Ya han hablado con su agencia para marcar el camino. Él quiere quedarse, pero también espera que le valoren en su medida. En cuanto cumpla los 18 años será blindado y con una cláusula de 1.000 millones para evitar tentaciones.